Amigo del planeta
Desliza hacia abajo para descubrir como podemos dejar menos huella juntos
Nos ocupamos de los residuos ayudándote a que siempre recicles o reutilices nuestras tarrinas. Nuestro envase reciclable está diseñado para mantener el gran sabor de Philly. Que los residuos de plástico acaben en la naturaleza es todo un reto. Aunque la cantidad de residuos de plástico enviados a reciclar se ha duplicado desde 2006*, sabemos que aún se puede hacer más para reducir nuestro rastro. Nuestras tarrinas, fabricadas para proteger la calidad de nuestro producto, ya están diseñadas al 100% para ser recicladas, pero eso no es todo. tu tambien puedes ayudar, cuando termines de saborear tu tarrina de queso Philadelphia y la recicles, estarás ayudando al planeta. Si no sabes cuál es el contenedor adecuado, consulta las indicaciones de reciclabilidad de la tarrina para saber cómo reciclar en tu zona. O da un paso más y reutiliza tu tarina. *PlasticsEurope (2019)
Ideas para empezar
Cultiva tus propias hierbas
Una tarrina regular de Philadelphia puede convertirse en el nuevo hogar de tus hierbas favoritas. Solo tienes que:
- Añadir algo de tierra en una tarrina limpia
- Plantar las semillas
- ¡Disfruta mientras tu planta crece!
Sácale partido a las sobras
Si has utilizado una tarrina de Philadelphia para cenar, déjala en la encimera. Si al acabar de cenar, tienes sobras, puedes meterlas en esa tarrina para que se conviertan en las estrellas de tu comida de mañana.
Qué organizado eres
Olvídate de rebuscar en ese cajón desordenado. Utiliza las tarrinas de Philadelphia para guardar pequeños objetos como botones, clips, alfileres o materiales de manualidades de forma segura y al alcance de tu mano.
Con la ambición de contribuir activamente en la reducción del uso de materiales de origen fósil, estamos asignando anualmente alrededor de 95 toneladas de plásticos de origen vegetal en la producción de nuestros envases de Philadelphia. Esto es equivalente a decir que reducimos 95 toneladas de plástico de origen fósil en toda Europa, lo que representa el peso de más de 150 vacas que producen nuestra leche fresca*.
Los plásticos de origen vegetal en nuestros envases provienen de residuos/ desechos de aceite vegetal. Después de su uso primario, son recolectados e integrados aleatoriamente en la composición de nuestras tarrinas de Philadelphia atribuidos por balance de masa certificado por ISCC, Sistema de Certificación Internacional de Sostenibilidad y Carbono (ISCC, por sus siglas en inglés). Sus características son idénticas a las del plástico de origen fósil en cuanto a la capacidad de reciclabilidad y a la protección de la frescura de nuestro queso crema Philadelphia.
*Peso promedio de una vaca de 600kg. La tonelada anual final de plástico de origen vegetal depende del número final de tarrinas de Philadelphia Vegetal del año. Cálculo realizado utilizando las expectativas de ventas de 2024.
Puede que te sorprenda saber que el 53% de los residuos alimentarios se producen en los hogares, mientras que sólo el 30% tiene lugar en las instalaciones de producción o transformación*. Así que, como amigos de la comida que somos, hemos preparado algunas recetas que no te querrás perder. ¿Por qué no le das un poco de amor a tus sobras con un toque de Philadelphia? O aprovecha las verduras "feas". También nos hemos asociado con "Too Good To Go", una start-up que ayuda a luchar contra el desperdicio de alimentos a través de la educación y el intercambio de buenas prácticas, en Alemania, Dinamarca y Suecia. *FUSIONS (Food Use for Social Innovation by Optimizing waste prevention Strategies), 2016.
Cuidamos todo lo que ocurre entre bastidores, reduciendo los residuos en cada paso del ciclo. Fabricamos solo lo que creemos que se venderá con una previsión de ventas precisa. Si nos sobran existencias, buscamos la forma de no desperdiciarlas. A menudo, lo donamos a organizaciones benéficas. Además, realizamos los envíos de la forma más eficiente posible para intentar reducir las emisiones de carbono.
¿Cómo lo hacemos?
El enfoque de balance de masa
Para la producción de nuestros envases, hemos reducido el consumo de plástico de origen fósil, asignando una cantidad equivalente de plástico de origen vegetal. La asignación de plástico de origen vegetal se realiza a través del llamado « enfoque de balance de masa », que significa que asignamos una cantidad de material de origen vegetal, que cumple con los requisitos de certificación de ISCC, para producir los nuevos envases de Philadelphia Vegetal. El enfoque de balance de masa permite rastrear la cantidad y las características del material biocircular en la cadena de valor certificada por ISCC y atribuirlo en base a una contabilidad verificable a lo largo de la cadena de valor de producción.
Plástico de origen fósil
Plástico de origen vegetal
Mezcla de materiales en nuestro proveedor
Se envían a nuestra planta las tarrinas de Philadelphia certificadas por ISCC con el contenido equivalente de plástico de origen vegetal atribuido por balance de masa.
Se llenan las tarrinas de Philadelphia con nuestro deliciosamente cremoso producto
Philadelphia apoyando la bioeconomía
Estamos apoyando la bioeconomía, garantizando que 95 toneladas de plástico de origen vegetal sean incorporadas en los flujos de producción de nuestro proveedor. ¡Esta es la misma cantidad de plásticos que son necesarios para distribuir nuestro último lanzamiento, Philadelphia Vegetal, en toda Europa! * El envase cuenta con una etiqueta indicativa que muestra el uso de esta resina de origen vegetal y la validación del proceso por parte de nuestro socio externo ISCC. Mínimo 90% del tonelaje necesario para la producción de Philadelphia Vegetal en Europa anualmente
DISEÑADO PARA SER PLÁSTICO DE ORIGEN VEGETAL
Plástico de origen vegetal certificado por ISCC y asignado a través del enfoque de balance de masa.
El Sistema de Certificación Internacional de Sostenibilidad y Carbono (ISCC, por sus siglas en inglés) es una iniciativa de un organismo totalmente independiente. Se trata de un sistema de certificación líder que apoya cadenas de suministro sostenibles, completamente rastreables, libres de deforestación y respetuosas con el medioambiente. Con la certificación ISCC, contribuimos a una producción ambiental, social y económicamente sostenible. Más información en: https://www.iscc-system.org/
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